A encuentro abierto

Dentro de dos minutos he quedado con tres grandes mujeres y mejores escritoras. La mayoría las conocerá de WordPress, donde han dado mucho que hablar. Los que no, podéis pinchad en sus nombres para conocer su arte. Sí, hablo de Henar, Margui y Valeria. En las manos llevo el nuevo libro que ha escrito Henar, en el que tanto ellas como yo hemos colaborado. Mi intención es que me lo dediquen, pero con estas chicas nunca se sabe. Lo que sí sé es que voy a ser la envidia de toda la blogosfera por poder deleitarme con la compañía de estas tres artistas al mismo tiempo. Las veo en el punto de encuentro, me acerco a ellas y las sonrío. Después de darles unos cuantos besos y abrazos y disfrutar del momento, charlamos de cosas sin importancia (para la entrada de hoy, que no para nosotros) hasta que saco el libro, que es lo que nos ha hecho vernos y de lo que hemos venido a hablar.

Óscar: Bueno, bueno… ¡Henar, tengo aquí tu tercer libro! Me lo he traído para que me lo dediquéis las tres, que lo sepáis. Mientras, dime, Henar, ¿de qué relato te sientes más orgullosa? ¿O cuál es el que más te gusta?

Henar: ¿Quién tiene el boli? Sí, Óscar, te estoy ignorando, pero te estoy poniendo una dedicatoria chulísima. Es que vaya preguntas me haces. Ni que no supieras que soy la viva imagen de la indecisión. Buf. No sé. Me gustan muchos por diferentes motivos, por lo que encierran, porque lo que me marcaron, por el momento…

Margui: Y oye, perri, hablando de momentos, ¿de qué fecha es el relato más antiguo del libro?

Henar: ¿Me vas a hacer mirarlo? A ver… —Henar busca en su móvil—. ¡Es de hace más de dos años!

Margui: Pobres relatos, ahí durmiendo tanto tiempo. Y encima les colaste por la cara una novela. Pedazo de cabreo debieron de pillarse. 100, tenían que ser 100.

Valeria: Al recopilarlos, ¿había alguno del que no te acordaras?

Henar: Ahora que lo dices… Algo así me pasó. Tenía el centenar, los había leído y releído varias veces y, de repente, en mitad de un insomnio, ¡coño, recuerdo uno que no está! No me juzguéis —busca compasión con su mirada—. Sé que vosotros también sois un despiste. Sin ir más lejos, tú, Val, te olvidaste un poco de mí cuando te pedí que me hicieras la portada. Eso sí, la espera mereció la pena.

Valeria: A ver, a ver, no me olvidé. Pero es verdad que me costó encontrar el tiempo y el valor para hacerla. ¿Te acuerdas que hubo otro primer intento, en blanco y negro

Henar: Me acuerdo, sí, y del tiempo en el que estuve mordiéndome las uñas por ver el siguiente boceto.

Margui: Me tenías la cabeza con un martillo percutor a golpes, sin descanso, por no presionar a Valeria y que tuviera la libertad necesaria.

Valeria: ¿En serio, Margui? ¿Henar te tenía vuelta loca? Ja, ja, ja, ja. Lo siento.

Henar: No lo sientas. Me recompensaste. Llegó el diseño, el bueno, el increíble, el apoteósico… Me quedo sin adjetivos. ¿De dónde te vino la idea?

Valeria: Ja, ja, ja, ja, ja, ja. Exageras… Pues no sé, no quería hacer lo mismo de siempre ni que quedara sosa.

Óscar: ¿Con «lo mismo» te refieres a un dibujo erótico?

Valeria: Con lo mismo me refería a dibujos en blanco y negro.

Óscar: Y yo que no veía mal lo del dibujo erótico…

Valeria: Bueno, quería que la personalidad de Henar se reflejara de algún modo. Ella es apasionada y fuerte, no le da miedo hacer lo que le gusta y pone toda la carne en el asador, así que, supongo que quise expresar que lo da todo, que se deja el alma, el corazón.

Margui: Ella tenía confianza ciega en ti.

Valeria: Lo sé. Igual que en ustedes con el prólogo y la contraportada.

Margui: Sí, aunque los verdaderos protagonistas son los que van a leer el libro. ¿Sabes, Valeria? Henar sabía que lo conseguirías, solo quería que te lo creyeras tú.

Valeria: Sí…  —Se siente un poco culpable —. Tengo ese problema, y me estreso tanto que soy incapaz de ponerme a ello por miedo a que no salga bien. Bueno, por lo menos estoy contenta porque sé que le gustó de verdad. No solo porque es sincera y me lo habría dicho de no ser así, sino porque tuve la oportunidad de decirle por teléfono: «¡Mira el correo!»

Henar: Recuerdo aquel día… —suspira mientras piensa— Tenía 15 mensajes, dos llamadas perdidas, y todos de Valeria. Es la única ocasión en la que me he arrepentido de tener el móvil lejos. Podía haberme quedado anonadada y encantada mucho antes.

La risas con algo de vergüenza de Valeria tapan las nuestras.

Henar: Eh, por su voz y por la pasada de portada.

Margui: Qué voz isleña…

Óscar: Pues te diré algo, Valeria, deja el miedo de lado si vas a hacer portadas como la de este libro, está genial. Por cierto, Margui, después de leer el prólogo me surgió una duda… ¿Pensabas en alguien en concreto cuando lo hiciste?

Margui: En los lectores que han paseado por los relatos desde que se crearon.

Óscar: Vale, me alegra saber que no es nada contra nadie concreto —respiro aliviado —.

Margui: No habrá muertos. Ja, ja, ja, ja, ja. —Eso me hace sentirme más aliviado aún —. Cuento sensaciones relatadas con el cuerpo. Henar es pura, sin filtro.

Valeria: Total.

Margui: De ahí que ofreciese ir desarmándome a cambio de poder llegar hasta el final. Darlo todo. Eso es en definitiva: entregarse.

Óscar: Guau. Me vais a dejar mal. Yo no sé decir tantas cosas buenas de Henar y no pensé tanto cuando hice la contraportada. De hecho, mi idea era «que le guste y te incluya, a ver si consigues triunfar aunque sea por la puerta de atrás de alguien que, en breve, será famosa».

Margui: No seas llorón, que eres quien más la quiere.

Valeria: Bueno, Óscar quiere a todo el mundo.

Margui: A mí no.

Valeria: Seguro que sí, porque es darle la hora y te suelta un piropo. Lo digo con cariño, no pares, ¿eh?

Óscar: Ja, ja, ja. A ver…  Hago el amor y no la guerra.

Valeria: ¡Sí! Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja.

Henar: Y a parte de hacer el amor, en lo que recuperabas el aliento, tuviste tiempo de escribirme la contraportada. ¿Te llegué a dar las gracias?

Óscar: Haberme hecho un hueco en tu libro ya es suficiente agradecimiento. De todas formas, me haces otro cuando seas famosa y me daré por recompensado. Pero sí, lo hiciste.

Henar: Esto hace que se pase el estado de emoción contenida en el que me habíais sumido por hablar tan bien de mí. Gracias, Óscar.

Margui: Ey, Henar, ¿te has guardado algún as en la manga? ¿Alguna sorpresa?

Henar: Si lo digo, ¿no dejaría de ser una sorpresa?

Valeria: ¡Salimos todos desnudos! ¡Compren el libro!

Reímos los cuatro, aunque el hecho de que yo aparezca desnudo en el libro no creo que incite a nadie a comprarlo. Reviso mi ejemplar, por si acaso, y compruebo que debe de tratarse de una edición antigua. Seguimos hablando y riendo hasta que el sol se pone y no despedimos. Yo, yo, yo… puedo decir que he pasado una tarde estupenda en compañía de unas blogueras a las que tengo mucha admiración y cariño. Espero hacer otra reunión pronto con algún otro libro para tener firmado.

Mini-sesiones de verano

¿Os acordáis de Loren, la fotógrafa? Es una mujer simpática, sensible, risueña, entregada, apasionada con tu trabajo, luchadora, divertida, llena de energía, y, afortunadamente, con defectos que la hacen muy humana y poco aburrida. Ayer la conocí en persona, puse una imagen real a esa que ocasionalmente había visto en fotografías. Y, entre otras muchas cosas, me habló de sus proyectos a corto plazo. Uno de ellos son las promociones de verano, que incluyen un regalo único en una sesión normal y unas mini-sesiones especiales. De estas mini-sesiones hizo una el pasado sábado 16 de julio y tiene otra planificada para el viernes 12 de agosto. Como podéis descubrir pinchando en estas letras azules, son un 50% más baratas que las normales, pero sin mermar la calidad, la compañía y el fantástico ambiente que esta mujer genera a su alrededor. Quería hablaros de ella porque este día 12 es el momento de hacer ese regalo a quien queréis, de daros ese gustazo que lleváis tiempo deseando, sin gastaros mucho dinero y pasando una tarde inolvidable en su compañía.

Minisesiones 2Y es que esta mujer es capaz de hacer magia con sus manos y una cámara. Puede lograr que las fotos hablen, que casi cuenten las historias que albergan. Loren consigue que sientas las imágenes que ves delante de ti, hayas vivido el momento, o no. Hace que los instantes se muevan, porque nuestra mente recrea el momento de las fotografías como si estuviéramos siendo partícipes de la sesión. Os recomiendo que os paséis por el blog si no la conocéis, que descubráis las mini-sesiones y que las contratéis antes de que se agoten como ya pasó con la de hace tres días. Y si no, que se las enseñéis a vuestros contactos compartiendo esta entrada o la suya propia, porque quizá conocéis a alguien que sí le interesa. Además, podéis ver las sesiones que realiza y el trabajo tan espectacular que hace esta chica.

Muchos os preguntaréis qué saco yo de todo esto, porque en general nadie da nada sin esperar algo a cambio. Os confieso que en esta ocasión yo tampoco lo hago. Si logra contactos por esta entrada, seguramente yo consiga volver a tomar un café con ella y verla sonreír otra vez de forma constante; y es muy probable que también me lleve un abrazo de agradecimiento. Y obtener todo eso de su parte no tiene precio.

De momento, os dejo con la entrevista que le hice en su momento para que la conozcáis a ella, y su trabajo. Como veréis, hace muchas promociones y sorteos, por lo que no deberíais perderos su blog, y os animo a seguirla desde ya. Un abrazo enorme para Leo, que la cuida desde allí arriba.

Amanece con Leo 2-11-15 -  LorenPhotography_3-FirmadaHace unas semanas os traía la historia de un DNI real, el de una escritora que había publicado su primer libro. Hoy vuelvo a profundizar un poco más en el nombre del blog, en esa cara que se esconde tras un número de ocho cifras y una letra. Hoy está con nosotros Loren, una estupenda fotógrafa que lucha por hacerse un hueco en el difícil mercado de la imagen. Loren nos alegra las mañanas con diversas instantáneas de sus sesiones cargadas de sentimiento o de sus amaneceres. Son imágenes que alegran el día. Y quiere enseñarnos cómo se ve el mundo a través de su cámara.

– Buenos días Loren. Es un verdadero placer contar contigo hoy aquí.

El placer es mío, Óscar.

– ¿Siempre has tenido claro que querías dedicarte a la fotografía?

Siempre me he sentido atraída por el arte en general. Hay varios artistas en mi familia, y supongo que eso ha tenido que ver. Me identifiqué más con la fotografía desde siempre, pero todo el mundo me decía que del arte no se vivía, que tenía que estudiar «una carrera seria», que tenía que ser madura y responsable… Y yo, como niña buena y obediente, siempre hice caso a lo que el mundo esperaba de mí. Acabé mi carrera de trabajo social y encontré trabajo en ello. Luego la vida me abocó a cambiar de ciudad y empezar de nuevo. Un par de años después, fui madre. Y fue en ese momento cuando cambió todo, cuando me transformé. Me encontré a mí misma, me reconcilié con la vida, y me aventuré a vivirla.

– ¿Y es en ese momento cuando rediriges tu vida hacia la fotografía?

Exacto. Ante la imposibilidad de conciliar mi vida profesional con horario demencial aquí en Madrid, con mi vida como madre sin apoyo familiar, decidí quedarme con mi hijo y cumplir mi sueño. Me puse a estudiar de nuevo, pero esta vez Fotografía en una de las mejores escuelas de Madrid. Quería reciclarme, reafirmarme, respetarme y aceptarme como era, independientemente de lo que dijesen los demás. Ya era hora.

– Es que al final, perseguir tus sueños y, como en tu caso, conseguirlos, es lo que hacen que uno trabaje con una dedicación, ilusión y felicidad interior distinta al resto. ¿Es necesario saber captar el mundo de una forma diferente a como lo hacemos el resto de personas para obtener lo mejor de cada instante?

Es necesario, bajo mi punto de vista, tener una sensibilidad especial, y mucho corazón. Sentimientos a flor de piel: alma. Tener una mente creativa, mucha cultura visual, ser autocrítico, flexible y trabajar, trabajar, trabajar…

– Por tus fotografías, doy fe de que cuentas con las características que enumeras, no hay más que ver tus sesiones. En un mundo con tanta oferta como es el de la imagen, ¿es difícil conseguir un nombre?

Es muy, muy difícil. Yo ando en ello, y cada día doy un pasito más para lograrlo. Sé cómo hacerlo, y no me rendiré hasta que suceda. Una tiene que poner lo mejor de sí misma en cada trabajo, ofrecer algo con alma, grande, especial, positivo. No se trata sólo de querer, sino de no dejar de creer, de dar la mejor versión cada día y la mejor de las sonrisas. Y sobre todo no rendirse jamás. Los que triunfan son los que perseveran en intentarlo.

– Y para conseguir ese hueco, ¿qué es lo que ofreces tú aparte de esa maravillosa sonrisa que veo que no deja de acompañarte?

¡Gracias! Bueno… Yo me defino como fotógrafa emocional. Normalmente la gente decide hacerse fotos en momentos claves de su vida, y esos momentos les construyen, les definen y les marcan para siempre. Yo presto atención a eso, a las emociones que están sintiendo y a los detalles de lo que está sucediendo. Mi intención es que cuando pase el tiempo y vean de nuevo las fotos, consigan volver a tener esa sensación que tuvieron mientras estaba pasando.

– Pues ya te digo que lo consigues, porque a veces lo siento hasta yo mirando algunas de tus fotos. Loren, ¿a ti qué es lo que te inspira para sacar adelante una sesión fotográfica?

La persona que me contacta, siempre. Me gusta conocer un poco a las personas a las que fotografío. Suelo mantener una relación fluida y cercana con ellos, que sientan que pueden confiar en mí, que pueden estar relajados. Quiero saber qué les gusta, qué les saca una sonrisa. Y quiero que eso sea lo que hagan, vivan y sientan cuando les tome una foto.

– Seguramente eso sea lo que ocurre en cada una de tus sesiones por cómo las describes en tu blog. Por cierto, ¿podrías contarnos como es una sesión de trabajo con Loren?

Es difícil, porque cada sesión es diferente. Yo no sigo un guión previo. Primero intento encontrar ese lugar donde los clientes se sienten cómodos y con el que conectan, eso es muy importante. Me planteo por qué quieren las fotos y qué necesitan reflejar en ese momento de sus vidas. Y me dejo llevar por la intuición, por lo que me cuentan con su lenguaje no verbal. Mis sesiones no suelen durar menos de dos horas porque necesito ese tiempo para encontrarles y encontrarme a mí misma con ellos.

– Esas son algunas de las ventajas de tu forma de trabajar, el tiempo que le dedicas a tus clientes y el trato cercano que tienes con ellos. ¿Son algo necesario para obtener un mejor resultado?

Totalmente. Si lo que yo les transmito a mis clientes es negativo, es eso lo que ellos van a reflejar en la sesión, y eso no nos vale a ninguno de los dos. Estar cómodos y que la jornada fotográfica sea divertida y agradable es fundamental, y sobre todo compartir con ellos la ilusión que están viviendo en ese momento me ayuda mucho a que mi trabajo mejore.

– Los que conocemos tu trabajo vemos siempre un gran desarrollo en exteriores. ¿Qué ventajas aporta?

Para mí no hay mejor escenario que la naturaleza, porque me proporciona libertad, calma, paz, y algo muy importante: belleza en estado puro. Rodearte y rodear a los demás de belleza les hace sentirse mejor, te sientes grande. Un escritor que me encanta decía que «La belleza es un éxtasis, y tan simple como el hambre. Realmente no hay nada que decir de ella. Es como el perfume de las rosas: lo sientes y eso es todo«. La belleza de la naturaleza es sencilla y salvaje a la vez, hermosa, cálida y acogedora. Lo que te transmite es exactamente lo que yo quiero que sintáis cuando veáis mi trabajo.

– Deduzco con esto que la fotografía de estudio no es de tus preferidas…

Exacto. Tengo un espacio que uso como estudio en determinadas ocasiones, todo depende siempre de lo que quiera y necesite el cliente. Pero me resulta mucho más difícil llevarme a alguien al terreno personal en un estudio, con la iluminación preparada y un espacio reducido de trabajo. Si ha de ser así prefiero el domicilio. La fotografía en domicilio es la “mejor sustituta de la naturaleza” porque, ¿dónde se encuentra uno más cómodo, más seguro, más feliz y más relajado que en su propia casa?

– Totalmente de acuerdo, nada como el propio hogar. Veo con asiduidad que nos regalas imágenes del amanecer. ¿Qué te aporta ese momento del día para que seas capaz de plasmarlo siempre de una forma tan estupenda?

Yo soy muy diurna. Duermo pronto y amanezco muy temprano, siempre de buen humor y a tope de energía. Creo que porque me resulta muy simbólico que el sol salga: es sinónimo de todo lo bueno que nos espera por delante, que está comenzando… Además, los colores del amanecer son una pasada, y la luz es fantástica en ese momento del día, todo está precioso. Además, aprovecho el paseo con Leo, mi galgo rescatado, y juntos nos solemos quedar a ver cómo sale el sol y lo disfrutamos. Hemos creado juntos #AmaneceConLeo.

– Seguro que Leo se lo pasa en grande contigo y disfruta de los amaneceres tanto como tú. En una ciudad tan grande como Madrid seguro que hay exposiciones de fotografía. ¿No te has planteado nunca participar en alguna?

Pues mira, aún no lo he comentado con casi nadie porque todavía no está definido, pero mis #AmaneceConLeo quizás acaben próximamente en una sala de exposiciones de aquí de Madrid. Según se vaya perfilando os lo iré contando en mis redes sociales. Y ahí podremos encontrarnos todos con un vinito, o lo que se tercie.

– Estoy convencido de que será un gran momento para ver en condiciones todos esos amaneceres con los que nos deleitas a menudo. ¿Tienes algún otro proyecto ahora mismo?

Pues alguna cosa que otra tengo en mente, pero ahora mismo el más interesante es el sorteo que tengo activo en mi blog y mi página del Facebook. Consiste en una sesión familiar para Navidad de regalo por seguir los pasos indicados en la entrada del blog del día 3 de noviembre. Los hago de vez en cuando porque la gente a mí me da mucho y me gusta ser agradecida.

– Por último, quisiera que nos indicaras cómo podemos localizarte, y cuál es la mejor opción para contratar una de tus fantásticas sesiones.

Para contactarme podéiss usar mi blog, mi página de Facebook o mi cuenta de InstagramLa mejor opción para contratar es siempre que me cuentes qué quieres fotografiar, sin ningún tipo de compromiso. Mis tarifas son muy económicas, al alcance de todo el mundo, y se adaptan mucho a las necesidades de cada persona. Si considero que alguien encaja más en una tarifa que en otra, se la propongo e intentamos adaptarla, aunque económicamente sea menos ventajosa para mí. Prefiero perder dinero y ganar una buena opinión. Así, por un lado consigo clientes agradecidos que han acabado siendo amigos (y eso no se puede pagar), y por otro doy pie a que me recomienden, ya que el «boca-boca» es muy efectivo. Además, respeto mucho la profesión y trato de ser honesta con lo que hago, valorando mi trabajo y la ilusión del que me contacta.

– Loren, ha sido un placer contar con tu compañía. Es una pena que no tengamos una cámara de fotos ahora, porque inmortalizarías este momento de una forma fascinante. Espero que te vaya genial y que pronto consigas ese nombre.

El placer ha sido mío. Muchas gracias.

Ya sabes, para esa ocasión especial, para ese momento que quieras mantener siempre en la memoria, para ese instante en el que pararías el reloj y el mundo, habla con Loren. Ella sabrá cómo hacer que todo eso ocurra.

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Entrevista – Cuidar con cuidado

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Marina, poco antes de cuidar con cuidado a sus pacientes

Hacía tiempo que no os deleitaba con la presencia de una bloguera con cosas que mostrarnos por mi casa (así, a lo Bertín Osborne). Por eso he decidido traeros a una de las mujeres más polifacéticas que hay en la blogosfera. Ella es Educadora infantil, Enfermera, Monitora de Masaje infantil, Educadora sexual, entrenadora de padres en Disciplina Positiva, se ha formado en lactancia y crianza respetuosa, en Análisis transaccional, y en Educación Emocional, entre otras cosas. Además lleva adelante un blog, una casa y una familia. Si eso no es ser completa, que baje Dios y lo vea. ¿Y por qué hoy? Porque aunque sea sábado y me haga trabajar, hoy es el día del Quijote, y ella es 100% quijotesca. Y con esa sonrisa que nos dedica, no importa trabajar un sábado. Marina viene a hablarnos de lo que mejor debe hacer: cuidar. Y para eso se vale de unos estupendos cursos y talleres que… mejor que nos lo cuente ella.

— Buenos días, Marina. Es un placer tenerte por aquí hoy.

Buenos días Óscar, el placer es mutuo. Gracias por tu invitación.

— Si no me equivoco, gestionas un blog que trata mucho con todas esas facetas que he enumerado de ti. ¿Qué te ha aportado el blog en relación a tu formación y preparación?

Más bien, ha sido al revés. He ido compartiendo valores, ideas, cuidados genéricos y concretos relacionados con mi formación y experiencia. Lo cierto es que llevo 5 años haciendo esto. Los últimos 6 meses con la retroalimentación de otros compañeros blogueros que han resultado ser verdaderos tesoros. :)))

— Aunque casi me has respondido a la pregunta antes de que te la haga, ¿qué has querido transmitir en tu blog?

He escrito todo este tiempo con el propósito de divulgar los cuidados, de compartir inquietudes. He encontrado personas muy creativas. Puntos de unión que en muchas ocasiones han sido espontáneos y en otras fruto del diálogo cooperativo donde ambas partes hemos aprendido.

— De todo lo que has escrito y compartido, que es mucho en cinco años de blog, ¿sobre qué te ha gustado más escribir?

Percibo un déficit de conocimiento en relación con la construcción de la identidad sexual, con la educación sexual, en general y he dedicado varias entradas a ello. Lo mismo con la educación emocional. No me he centrado en cuidados «típicos» como nutrición, ejercicio, curas de heridas, prevención de accidentes, patologías… Porque entiendo la dimensión humana de una manera muy amplia y las redes están saturadas con esos cuidados. Quería aportar mi toque personal. No se trata de ser ejemplo de nada. Simplemente me hago preguntas, busco respuestas y comparto gran parte del proceso. Estoy segura de que a muchas personas les pasa lo mismo que me pasa a mí.

— De todas las cosas que haces, ¿con cuál te sientes más cómoda?

¡Uy! Qué pregunta tan interesante. Entiendo que te refieres a mi perfil profesional. Me gusta mucho ser enfermera, ahora donde soy Marina 100% y desarrollo todo mi talento es cuando doy cursos o talleres. La formación es mi pasión.

— Actualmente eres enfermera y diriges un blog que se llama ‘Cuidar con cuidado‘. Esa frase, en alguien que se dedica a tratar con gente que no está bien de salud, es de agradecer. ¿Es esta una definición de tu forma de ser en el trabajo?

Sí. Creo que se puede y de debe hacer de los cuidados un arte. Cuidar la relación terapéutica. Salvaguardar la dignidad de las personas, máxime en situaciones de vulnerabilidad.

— Ojalá más de uno hiciera un arte de ello, como bien dices. Me has comentado que das cursos y talleres. ¿De qué son?

Pues hasta ahora he dado charlas sobre el sueño del niño, el llanto infantil, la sexualidad en el embarazo y la lactancia. Talleres de apoyo a la lactancia materna. Además de todo lo relacionado con la educación para la salud. En este momento estoy cerca de realizar mi sueño de Escuela de Padres. Para eso me he certificado en Disciplina Positiva, primero como madre y más tarde como entrenadora de padres.

— ¡Entrenadora de padres! Hablando desde el desconocimiento, ¿eso consiste en enseñar a las personas a ser padres?

Sí, enseñar y aprender a ser padres y madres. A educar con firmeza y con cariño al mismo tiempo. La mayoría de los profesionales hacemos Másteres y cursos para actualizarnos en nuestra profesión. Y creo que la «profesión» más importante es educar a una persona. Los padres y las madres tenemos en nuestras manos a personas que esperan un modelo para desarrollarse como individuos independientes y felices. Sin duda los padres hemos de formarnos en esta importante tarea que desarrollamos cada día. Por eso primero me formé como madre y ahora quiero poner mi grano de arena y compartir esta Disciplina con otras familias.

— Un hijo es algo que viene sin libro de instrucciones, por lo que toda la ayuda que nos puedan facilitar, y más si viene de una experta en la materia, se agradece y esa bienvenida. Los talleres que nos has comentado y la escuela de padres resultan de lo más interesantes. ¿Qué duración tienen?

Existen diferentes formatos. En general las charlas suelen durar 2 horas y son participativas. Los talleres, pues me ajusto a los formatos de las asociaciones. El de Lactancia son 3 sesiones. El de Masaje infantil son 5 sesiones y el de Disciplina Positiva son 7 sesiones. En todos los casos una sesión a la semana. Es importante dar tiempo para reflexionar y practicar lo aprendido.

— ¿Tienes planificado algún evento al que estemos a tiempo de apuntarnos?

¡Sí! El sábado 28 de mayo ofrezco un café con Disciplina Positiva para dar a conocer sus principios y si las personas que acudan están interesadas montaremos un taller a su medida.

— Para terminar, te agradecería que nos contaras cómo podemos apuntarnos no sólo a este café, que ya lo hemos visto en la foto de cabecera, sino a tus charlas y talleres, además de la escuela de padres.

Pues habitualmente me contratan empresas y son ellas quienes difunden. Ahora colaboro con osteokid & adult y María se encarga de esto. Yo lo compartiré en mi página de Facebook, para que podáis acceder. Si alguna persona está interesada tengo diseñado el formato «Un café con…» de forma que me acerco al domicilio y doy la charla sobre un tema concreto para el grupo de amigas/os que me contratan, así se ahorran desplazamientos. Soy yo quien se traslada.

— Muchas gracias por tu visita Marina, ha sido un placer dejarse cuidar por una profesional como tú. Te deseo la mejor de las suertes en la consecución de ese sueño de la Escuela de Padres.

Óscar, estás invitado al café, me encanta cuando acuden los padres a los eventos. Ha sido un placer compartir este tiempo y espacio contigo. Mil gracias.

Muchas gracias por la invitación, Marina. No sé si habéis echado ya un vistazo a su blog, habéis sido tan generosos de esperar a leer la entrevista al completo o si ya la conocíais. En cualquier caso, os indico que podéis escribirle un correo para cualquier duda que tengáis sobre talleres y clases al correo cuidarconcuidadoblog@gmail.com, que podéis visitar su blog pinchando en estas letras, y también que podéis dar me gusta a su página de Facebook pinchando en estas letras, para estar enterados de sus novedades en cuanto a charlas, talleres y a la Escuela de Padres. Os puedo asegurar que no la defraudará. Sobre todo a esa legión de padres y madres actuales, recientes y futuros que viajáis por la blogosfera. Gracias a todos por estar aquí, un abrazo.

Entrevista – Fotografíate con Juan

Juan Ingelmo InteriorLe he cogido el gusto a realizar entrevistas, y esta es la tercera que realizo en mi blog. Es el segundo fotógrafo que pasa por aquí, y aunque este chico no es bloguero (todavía), para mí es una persona muy especial porque ha sido quien ha realizado la portada de mi segundo libro, ‘99 instantes‘. Juan Ingelmo es un joven fotógrafo que comenzó en el mundo de la fotografía por afición y que poco a poco se ha ido abriendo paso en el difícil mundo de la imagen.

– Buenos días Juan. Es un honor tenerte hoy conmigo.

Buenos días a ti también, Óscar. El honor es mío.

– En tu web comentas que empezaste como mero entretenimiento en este mundo. ¿Qué diferencia has notado al dejar la fotografía como entretenimiento y hacerlo de forma profesional?

En realidad no he notado ninguna diferencia porque sigo disfrutando tanto o más que antes, por ello no veo mi trabajo como una obligación. Me considero un privilegiado pudiendo hacer lo que me más me gusta.

– Es una delicia poder trabajar en lo que quieres, cuántos desearían poder hacerlo… ¿Cuánto tiempo sueles dedicarle a una sesión?

Es difícil de cuantificar. Cada sesión de fotos es diferente, por lo que no me marco unos tiempos de dedicación. Únicamente cuando el resultado obtenido es perfecto considero que la sesión ha terminado.

– Y se nota esa perfección en tus trabajos, desde luego. En tu página hay reportajes de diversos tipos, ¿cuál es el que más te gusta llevar a cabo?

Si bien es cierto que empecé haciendo fotografía deportiva, dado que mi hermano practicaba fútbol e iba todos los fin de semana a verle y capturar cada uno de sus movimientos, reacciones… actualmente hago mucho más retrato. Aunque disfruto de todos los tipos de fotografía que hago.

– Eso es lo importante, que disfrutes con todos los estilos para sacar lo mejor de ellos. Hay una cierta predisposición a pensar que hay que ser modelo para poder tener un buen book de fotos. ¿Es eso cierto?

Yo defiendo que todo el mundo puede ser modelo y tener un buen ‘book’ de fotos. Todas las personas son especiales. ¿Por qué un canon de belleza supuestamente perfecto, que nos quieren imponer, nos va a privar de poder tener un ‘book’? ¿Solo por el hecho de que para esas personas no entremos en ese canon que nos venden como ideal?

– Totalmente de acuerdo, habría que romper demasiados clichés existentes… ¿Cómo consigues que la gente se sienta tan desinhibida y natural?

Creo que cuando la persona que tengo delante me ve disfrutar del trabajo que estamos realizando, ella misma ya se desinhibe y saca su lado más natural. Pero también me gusta hablar con la gente que deposita su confianza en mí, me gusta bromear y crear una atmósfera en la que se encuentren cómodos.

– Y lo están, al menos eso se transmite en los distintos reportajes de tu página, reportajes en los que se puede ver que juegas mucho con la distinta iluminación ambiental. ¿Cuánta importancia tiene la luz en una sesión de fotografía?

La luz es la herramienta que uso para transmitir un mensaje en la foto. Diferentes orientaciones de luz dan diferentes mensajes. El uso combinado de la luz de flash y la luz ambiente genera escenarios distintos donde contar la historia que se pretende en cada sesión.

– Y algunas instantáneas hacen un gran uso de esa combinación, la verdad. ¿Tú planificas cada sesión antes de hacerla o te dejas llevar?

En este aspecto soy bastante… digamos meticuloso. Me gusta preparar cada una de las sesiones que hago ya que cada persona es diferente, pero una vez comenzamos la sesión también me dejo llevar por la inspiración que pueda surgir, al igual que me gusta hacer cómplice al modelo. Así, si tiene una idea la escucho y la plasmamos en una foto.

– Es buena cierta improvisación de vez en cuando, desde luego. ¿Te resulta más cómodo trabajar en un estudio o prefieres localizaciones externas?

Son ambientes diferentes que ofrecen distintas opciones. El estudio me da unas posibilidades que el exterior no, y viceversa. Actualmente, por las circunstancias, trabajo más los exteriores.

– Al final los exteriores son infinitos, en contraposición de la limitación de un estudio… ¿Tienes algún referente a la hora de trabajar?

¿Referente? Me gusta mucho ver fotos y cultivar mi cultura visual para aprender de todos y dar mi toque personal. No tienen por qué ser profesionales contrastados, hay gente anónima (todavía) que hace trabajos espectaculares y a ellos también les sigo. Pero sí tengo debilidad por Peter Coulson, Mario Testino y Patrick Demarchelier.

– Grandes artistas detrás de la cámara, sin duda. ¿Es necesario reciclarse en tu profesión como ocurre en muchas otras?

Por supuesto, si eres conformista, estás perdido. Pero no solo en este trabajo, en todos.

– Y seguir siempre aprendiendo. ¿A quién te gustaría hacerle una sesión?

A todo el que se lo plantee. Como ya te he dicho cualquier persona es especial, y me gusta que se sientan así con el trabajo que realizo para ellos.

– Porque nadie es mejor que nadie… ¿Cuál es tu mejor fotografía?

¿La mejor? La verdad es que todavía no la he hecho. Ésa sigue en mi cabeza.

– Y que así sea siempre, porque indicará que nunca dejas de mejorar. Por último, Juan, quisiera que nos indicaras cómo y dónde podemos localizarte, y cuál es la mejor opción para contratar una de tus estupendas sesiones.

Actualmente me encuentro entre Salamanca y Madrid, pero a través de mi página en Facebook, Juan Ingelmo Photography, además de poder estar en contacto de forma directa también se pueden ir viendo todos los trabajos que voy haciendo y disfrutar de ellos.

– Juan, ha sido un placer contar con tu siempre agradable compañía. Quisiera agradecerte de nuevo el tiempo que me dedicaste a mí y a mi libro. Espero que tu carrera esté plagada de éxitos.

Muchas gracias. Si me lo permites, no me gustaría despedirme sin mandar un saludo a las personas que me han ayudado en estos años, familia, amigos, compañeros…. Pero en especial a mis padres y a tres amigas, que han sido un pilar muy importante y lo serán siempre: Vega, Noemi y Sara.

Juan Foto Interna 2Si buscas una sesión especial para promocionarte en una agencia, si necesitas un book para recordar para siempre que tú también tienes cuerpo de modelo o si quieres mejorar tu imagen en tus perfiles sociales y laborales, no dudes en llamar a Juan. Él sabe cómo lograrlo.

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Entrevista – Fotografiando el mundo con Loren

Amanece con Leo 2-11-15 -  LorenPhotography_3-FirmadaHace unas semanas os traía la historia de un DNI real, el de una escritora que había publicado su primer libro. Hoy vuelvo a profundizar un poco más en el nombre del blog, en esa cara que se esconde tras un número de ocho cifras y una letra. Hoy está con nosotros Loren, una estupenda fotógrafa que lucha por hacerse un hueco en el difícil mercado de la imagen. Loren nos alegra las mañanas con diversas instantáneas de sus sesiones cargadas de sentimiento o de sus amaneceres. Son imágenes que alegran el día. Y quiere enseñarnos cómo se ve el mundo a través de su cámara.

– Buenos días Loren. Es un verdadero placer contar contigo hoy aquí.

El placer es mío, Óscar.

– ¿Siempre has tenido claro que querías dedicarte a la fotografía?

Siempre me he sentido atraída por el arte en general. Hay varios artistas en mi familia, y supongo que eso ha tenido que ver. Me identifiqué más con la fotografía desde siempre, pero todo el mundo me decía que del arte no se vivía, que tenía que estudiar «una carrera seria», que tenía que ser madura y responsable… Y yo, como niña buena y obediente, siempre hice caso a lo que el mundo esperaba de mí. Acabé mi carrera de trabajo social y encontré trabajo en ello. Luego la vida me abocó a cambiar de ciudad y empezar de nuevo. Un par de años después, fui madre. Y fue en ese momento cuando cambió todo, cuando me transformé. Me encontré a mí misma, me reconcilié con la vida, y me aventuré a vivirla.

– ¿Y es en ese momento cuando rediriges tu vida hacia la fotografía?

Exacto. Ante la imposibilidad de conciliar mi vida profesional con horario demencial aquí en Madrid, con mi vida como madre sin apoyo familiar, decidí quedarme con mi hijo y cumplir mi sueño. Me puse a estudiar de nuevo, pero esta vez Fotografía en una de las mejores escuelas de Madrid. Quería reciclarme, reafirmarme, respetarme y aceptarme como era, independientemente de lo que dijesen los demás. Ya era hora.

– Es que al final, perseguir tus sueños y, como en tu caso, conseguirlos, es lo que hacen que uno trabaje con una dedicación, ilusión y felicidad interior distinta al resto. ¿Es necesario saber captar el mundo de una forma diferente a como lo hacemos el resto de personas para obtener lo mejor de cada instante?

Es necesario, bajo mi punto de vista, tener una sensibilidad especial, y mucho corazón. Sentimientos a flor de piel: alma. Tener una mente creativa, mucha cultura visual, ser autocrítico, flexible y trabajar, trabajar, trabajar…

– Por tus fotografías, doy fe de que cuentas con las características que enumeras, no hay más que ver tus sesiones. En un mundo con tanta oferta como es el de la imagen, ¿es difícil conseguir un nombre?

Es muy, muy difícil. Yo ando en ello, y cada día doy un pasito más para lograrlo. Sé cómo hacerlo, y no me rendiré hasta que suceda. Una tiene que poner lo mejor de sí misma en cada trabajo, ofrecer algo con alma, grande, especial, positivo. No se trata sólo de querer, sino de no dejar de creer, de dar la mejor versión cada día y la mejor de las sonrisas. Y sobre todo no rendirse jamás. Los que triunfan son los que perseveran en intentarlo.

– Y para conseguir ese hueco, ¿qué es lo que ofreces tú aparte de esa maravillosa sonrisa que veo que no deja de acompañarte?

¡Gracias! Bueno… Yo me defino como fotógrafa emocional. Normalmente la gente decide hacerse fotos en momentos claves de su vida, y esos momentos les construyen, les definen y les marcan para siempre. Yo presto atención a eso, a las emociones que están sintiendo y a los detalles de lo que está sucediendo. Mi intención es que cuando pase el tiempo y vean de nuevo las fotos, consigan volver a tener esa sensación que tuvieron mientras estaba pasando.

– Pues ya te digo que lo consigues, porque a veces lo siento hasta yo mirando algunas de tus fotos. Loren, ¿a ti qué es lo que te inspira para sacar adelante una sesión fotográfica?

La persona que me contacta, siempre. Me gusta conocer un poco a las personas a las que fotografío. Suelo mantener una relación fluida y cercana con ellos, que sientan que pueden confiar en mí, que pueden estar relajados. Quiero saber qué les gusta, qué les saca una sonrisa. Y quiero que eso sea lo que hagan, vivan y sientan cuando les tome una foto.

– Seguramente eso sea lo que ocurre en cada una de tus sesiones por cómo las describes en tu blog. Por cierto, ¿podrías contarnos como es una sesión de trabajo con Loren?

Es difícil, porque cada sesión es diferente. Yo no sigo un guión previo. Primero intento encontrar ese lugar donde los clientes se sienten cómodos y con el que conectan, eso es muy importante. Me planteo por qué quieren las fotos y qué necesitan reflejar en ese momento de sus vidas. Y me dejo llevar por la intuición, por lo que me cuentan con su lenguaje no verbal. Mis sesiones no suelen durar menos de dos horas porque necesito ese tiempo para encontrarles y encontrarme a mí misma con ellos.

– Esas son algunas de las ventajas de tu forma de trabajar, el tiempo que le dedicas a tus clientes y el trato cercano que tienes con ellos. ¿Son algo necesario para obtener un mejor resultado?

Totalmente. Si lo que yo les transmito a mis clientes es negativo, es eso lo que ellos van a reflejar en la sesión, y eso no nos vale a ninguno de los dos. Estar cómodos y que la jornada fotográfica sea divertida y agradable es fundamental, y sobre todo compartir con ellos la ilusión que están viviendo en ese momento me ayuda mucho a que mi trabajo mejore.

– Los que conocemos tu trabajo vemos siempre un gran desarrollo en exteriores. ¿Qué ventajas aporta?

Para mí no hay mejor escenario que la naturaleza, porque me proporciona libertad, calma, paz, y algo muy importante: belleza en estado puro. Rodearte y rodear a los demás de belleza les hace sentirse mejor, te sientes grande. Un escritor que me encanta decía que «La belleza es un éxtasis, y tan simple como el hambre. Realmente no hay nada que decir de ella. Es como el perfume de las rosas: lo sientes y eso es todo«. La belleza de la naturaleza es sencilla y salvaje a la vez, hermosa, cálida y acogedora. Lo que te transmite es exactamente lo que yo quiero que sintáis cuando veáis mi trabajo.

– Deduzco con esto que la fotografía de estudio no es de tus preferidas…

Exacto. Tengo un espacio que uso como estudio en determinadas ocasiones, todo depende siempre de lo que quiera y necesite el cliente. Pero me resulta mucho más difícil llevarme a alguien al terreno personal en un estudio, con la iluminación preparada y un espacio reducido de trabajo. Si ha de ser así prefiero el domicilio. La fotografía en domicilio es la “mejor sustituta de la naturaleza” porque, ¿dónde se encuentra uno más cómodo, más seguro, más feliz y más relajado que en su propia casa?

– Totalmente de acuerdo, nada como el propio hogar. Veo con asiduidad que nos regalas imágenes del amanecer. ¿Qué te aporta ese momento del día para que seas capaz de plasmarlo siempre de una forma tan estupenda?

Yo soy muy diurna. Duermo pronto y amanezco muy temprano, siempre de buen humor y a tope de energía. Creo que porque me resulta muy simbólico que el sol salga: es sinónimo de todo lo bueno que nos espera por delante, que está comenzando… Además, los colores del amanecer son una pasada, y la luz es fantástica en ese momento del día, todo está precioso. Además, aprovecho el paseo con Leo, mi galgo rescatado, y juntos nos solemos quedar a ver cómo sale el sol y lo disfrutamos. Hemos creado juntos #AmaneceConLeo.

– Seguro que Leo se lo pasa en grande contigo y disfruta de los amaneceres tanto como tú. En una ciudad tan grande como Madrid seguro que hay exposiciones de fotografía. ¿No te has planteado nunca participar en alguna?

Pues mira, aún no lo he comentado con casi nadie porque todavía no está definido, pero mis #AmaneceConLeo quizás acaben próximamente en una sala de exposiciones de aquí de Madrid. Según se vaya perfilando os lo iré contando en mis redes sociales. Y ahí podremos encontrarnos todos con un vinito, o lo que se tercie.

– Estoy convencido de que será un gran momento para ver en condiciones todos esos amaneceres con los que nos deleitas a menudo. ¿Tienes algún otro proyecto ahora mismo?

Pues alguna cosa que otra tengo en mente, pero ahora mismo el más interesante es el sorteo que tengo activo en mi blog y mi página del Facebook. Consiste en una sesión familiar para Navidad de regalo por seguir los pasos indicados en la entrada del blog del día 3 de noviembre. Los hago de vez en cuando porque la gente a mí me da mucho y me gusta ser agradecida.

– Por último, quisiera que nos indicaras cómo podemos localizarte, y cuál es la mejor opción para contratar una de tus fantásticas sesiones.

Para contactarme podéiss usar mi blog, mi página de Facebook o mi cuenta de InstagramLa mejor opción para contratar es siempre que me cuentes qué quieres fotografiar, sin ningún tipo de compromiso. Mis tarifas son muy económicas, al alcance de todo el mundo, y se adaptan mucho a las necesidades de cada persona. Si considero que alguien encaja más en una tarifa que en otra, se la propongo e intentamos adaptarla, aunque económicamente sea menos ventajosa para mí. Prefiero perder dinero y ganar una buena opinión. Así, por un lado consigo clientes agradecidos que han acabado siendo amigos (y eso no se puede pagar), y por otro doy pie a que me recomienden, ya que el «boca-boca» es muy efectivo. Además, respeto mucho la profesión y trato de ser honesta con lo que hago, valorando mi trabajo y la ilusión del que me contacta.

– Loren, ha sido un placer contar con tu compañía. Es una pena que no tengamos una cámara de fotos ahora, porque inmortalizarías este momento de una forma fascinante. Espero que te vaya genial y que pronto consigas ese nombre.

El placer ha sido mío. Muchas gracias.

Ya sabes, para esa ocasión especial, para ese momento que quieras mantener siempre en la memoria, para ese instante en el que pararías el reloj y el mundo, habla con Loren. Ella sabrá cómo hacer que todo eso ocurra.

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Entrevista – Pensando en la oscuridad con Henar

La Relatadura

La RelataduraTras más de un año de blog, ha llegado el día en el que voy a rendir homenaje al nombre del mismo. Voy a contar una historia, una historia tras un DNI, con nombre, apellidos y número. Pero no serán revelados, no hay necesidad. Si hace unas semanas os recordaba que un gran amigo me entrevistaba por la autoedición de mi libro, hoy es el turno de un servidor hacer de entrevistador por algo similar. La historia que vengo a contar es la de una chica con un sueño: ser escritora. Y para ello un día hizo lo que mejor sabe hacer, que es escribir. Plasmó sus historias en un blog, al que decidió llamar Pensando en la oscuridad. Hace unos meses hablé aquí mismo de él. Después decidió que era el momento de dar un paso más y escribir un libro. Un libro que recogiera sus 100 mejores relatos. Y hoy la tenemos aquí para que nos hable de su libro, porque ella ha venido aquí a hablar de su libro, y si no habla de su libro, se levanta y se va. Y queremos que se quede, que aún no hemos empezado.

– Hola Henar, bienvenida. ¿Ser escritor es algo que se lleva dentro? ¿Cuándo descubriste que querías ser escritora?

Hola Óscar. Entras al tema rápido… Dame un poco de conversación para librarme de la tensión o algo. Bienvenida y ¡hala! Ten dos preguntas. Antes de responder supongo que debo darte las gracias por insistir en hacerme esta entrevista. ¡Gracias!
Y ahora: ¿Ser escritor es algo que se lleva dentro? Bueno, desde mi humilde opinión creo que sí. De hecho pienso que todos llevamos uno. Es el que sale al contar una anécdota a alguien, cuando mentimos, cuando soñamos… Y yo soñé que era escritora. Literal, estaba dormida y en mi sueño escribía un libro. Luego solo fue ponerse a ello. Entonces descubrí que me gustaba.

– Hiciste un gran descubrimiento, y los que apreciamos la buena lectura te lo agradecemos. Te diste a conocer con el blog Pensando en la oscuridad, donde empezaste hace casi un año. ¿Qué recuerdas de aquellas primeras entradas?

No le hagas tan viejo a mi blog, que está un poco susceptible. Casi un año… Cómo corre el tiempo, pero sí, soy capaz de recordar que en esos primeros pasos era mucho más insegura. Casi estaba empezando a escribir, no me había leído mucha gente y quizá me asustaba que fueran crueles, que alguien apareciera y me dijera que no valía para ello. Resultó ser al contrario.

– Sin embargo, aunque todos se daban cuenta de que valías para ello, llegó un momento en que tu estilo cambió. ¿Por qué decidiste dejar de hablar de ti para escribir relatos?

Si escribes durante un tiempo es inevitable que tu estilo cambie, al menos eso creo. Sí, me doy cuenta, no me mires así, sé que es una respuesta evasiva.

– Hablemos de tu primer libro. Se llama La Relatadura y en un mes ha conseguido más de 200 descargas. ¿Te imaginabas esta aceptación tan buena?

Ni un poco, no, para nada. Sí esperaba que mi familia lo descargara, un par de amigos y ya. Así estoy de feliz ahora, todavía intentando creerlo. ¿No seguiré soñando?

– No, no es un sueño. Es una muy buena obra, y una buena obra tiene precisamente eso, muchas descargas. El libro es un conjunto de tus 100 mejores relatos. ¿Puedes decirnos qué tipo de relatos vamos a encontrar en él?

Pues además de ese cambio de estilo que mencionas, también se puede encontrar una gran variedad de géneros. Es lo que pasa cuando se empieza. Te sientes como un niño el primer día que entra en una tienda de golosinas y quieres probarlo todo.

– Yo que lo he leído puedo decir que se trata de una mezcla muy bien llevada, ¿con cuál de estos géneros te sientes más cómoda cuando escribes?

Cómoda con todos, creo que es imprescindible a la hora de escribir, pero digamos que disfruto más con los que tienen su humor por retorcido que sea. Si consigo sacarme una carcajada, siento que ya he hecho mi trabajo con el resto.

– Lo bueno es que también se la consigues sacar al lector, y eso en ocasiones no es fácil. Yo me declaré fan incondicional de los giros que dabas en la última frase en muchos de tus relatos. ¿Te resulta complicado hacer creer a la gente algo que en realidad no es?

Después de un tiempo la gente se vuelve desconfiada y busca ese giro, no creas. ¿Si es difícil? A veces me engaño hasta a mí, pero no soy quien para contestar esa pregunta. ¿Te paso el número de alguno de mis seguidores?

– Me parece bien, lo podemos hablar cuando acabemos la entrevista… Has dicho más de una vez que en tus relatos hay una constante que es la muerte, algo que tarde a temprano nos acaba visitando a todos. ¿Te cuesta escribir sobre ella?

Me cuesta desprenderme de ella. Lo intento, lo prometo. No sé por qué me viene tanto a la mente a la hora de escribir. Quizá por lo que dices o porque prefiero reírme de ella a temerla.

– ¿Qué sentiste cuando viste tu primer libro acabado y a la venta? ¿Y cuando lo tuviste en tus manos?

Es difícil de describir. Cuando llevas tiempo trabajando en algo y lo has terminado y lo palpas, y lo hueles, y te ves, y no lo chupas porque no quieres que la saliva lo dañe, es una gozada. Casi abrazo al tipo de SEUR que trajo el paquete.

– No es para menos, esa sensación hay que vivirla. Para tu primer libro te has decidido por la autoedición. ¿Fue tu primera decisión o intentaste primero que alguien te lo editara?

La primera, sí. Ni se me pasó por la cabeza que una editorial quisiera algo que ya está publicado en Internet de forma gratuita. ¿Y si me hace borrarlo del blog? Con la de recuerdos que tengo con la gente que me comenta… No sé.

– Tal y como está la economía actualmente, ¿es complicado que alguien te edite un libro? ¿Reporta los suficientes beneficios a los escritores noveles?

Los noveles siempre lo vamos a tener difícil a la hora de que una editorial se moleste en fijarse en nosotros. Soy un poco pesimista, tal vez. Pero algo me dice que escribir hoy en día no es un negocio si no tienes un nombre. Por lo cual a cualquiera le diría que no se va a hacer rico si escribe un libro. Pero de esperanzas se vive, ¿no?

– Quiero pensar que todos los que ahora son famosos empezaron siendo desconocidos, y que tú puedes tener también tu oportunidad. Para ello, ¿qué otros proyectos tienes en mente?

Mi mente es inquieta. Te puedo hablar del primer libro que escribí antes de abrir el blog y que está en modo repaso, o de la continuación de ese libro que se aparcó y en un garaje está cogiendo polvo. Puedo hablarte de otro libro de relatos más extensos que va a cámara lenta o de la segunda parte de La Relatadura, pero no lo voy a hacer porque aún no sé cuándo verán la luz.

– Cuatro proyectos, a cuál más interesante… Por último, para terminar, queremos que nos digas dónde y cómo podemos conseguir el libro que ya tienes publicado para poder disfrutarlo.

¿Ya hemos terminado? Pues no ha sido tan duro como creía.
Bien. Se puede encontrar en Bubok, pinchando sobre estas letras, tanto en PDF (de forma gratuita), como en papel.

– Henar, ha sido un placer tenerte hoy aquí. Te deseo el mayor de los éxitos con este libro, y con los siguientes.

Para quien no lo haya hecho ya, desde aquí le recomiendo que se haga con una copia de «La Relatadura», un libro entretenido, fácil de leer, que no aburre, que no cansa, y que engancha desde la primera página. Además, no tiene un final feliz; tiene cien.

Si queréis compartir esta entrada tan sólo tenéis que utilizar los botones que hay a continuación. Seguramente vuestros amigos también quieren leer este buen libro.