Querida Natalia

Hace algo más de dos meses que te cruzaste en mi camino. Creo que tú llegaste primero a mí, pero lo que sí sé a ciencia cierta es que tu llegada la acogí con ilusión porque acababa de llegar a los 100 seguidores. Al momento fui a tu casa, y entré allí con miedo, como entra uno en una casa desconocida. Despacio, sin gritar, sin hablar fuerte, para no molestar. Escuchando, mirando a todos los sitios, descubriendo las habitaciones que esconde tu hogar. Viendo cómo se comportaban los invitados, respetando y analizando todo lo que les contabas. En muy pocos días conseguiste hacer que me sintiera un habitante más de tu hogar, me acogiste con los brazos abiertos como haces con todo el mundo. Siempre tenías una sonrisa disponible para nosotros, de todas las veces que hablamos contigo nunca recuerdo una respuesta que no tuviera unas palabras llenas de cariño y de dulzura.

Poco a poco fui indagando en algunas de las historias que habías ido contando, y me enteré de que tu pasión son los pequeños y de que llevabas tiempo de baja porque estabas malita. Yo te di cariño y abrazos (virtuales) de la única manera que podía. Y cada día deseaba que nos dijeras que empezabas a estar mejor y que ya no estabas tan malita. No sueles quejarte ni en tu propia casa por mucho que te duela todo el cuerpo, tus historias no suelen demostrar el dolor que sientes. Siempre son alegres, distintas, nos enseñan un poco más de ti y nos animan a pensar en ti como una persona completamente sana. Por si fuera poco, el amor que desprendes cada vez que hablas con nosotros cubre cualquier atisbo de tristeza que pueda rondar por tus proximidades.

Pero este último mes llevo mucho tiempo sin escuchar tan a menudo tus historias, sin ver tus comentarios llenos de dulzura, sin tener conmigo esa fuerza que transmitías desde tu casa. Quizá me acostumbré a verte cada dos o tres días como mucho, y ahora pasan los días y no te siento cerca. Y me asusto. Y me preocupo. ¿Cómo no voy a preocuparme con el cariño que te tengo? Cuando hablé de las vidas de primera y de segunda, la gente me decía que aunque todos sean iguales, a cada uno nos importa más lo que sentimos más cerca. Y sé que hay mucha más gente malita, hay muchos que merecen una dedicatoria, un recuerdo y todo el cariño del mundo, hay un par de seguidores míos que también están muy malitos, pero tú interactúas conmigo, tú hablas conmigo, tú me das cariño y recibes el mío con una sonrisa. A ti te siento cerca, muy cerca. A pesar de tenerte a 600 kilómetros.

Por eso te quiero dedicar esta carta, porque si hay algo que me oprime por dentro es saber que te duele todo. Por eso te quiero decir desde aquí que tienes todo mi apoyo y mi cariño, aunque sólo pueda enviártelo a través del (ciber)espacio. Por eso te quiero mandar un abrazo, de los que te hacen cerrar los ojos y saber que nada malo puede pasarte, y un beso en la frente, de los que hacen que lo único que sientas es el calor de unos labios liberando tu mente de cualquier pensamiento negativo. Hace unos días leí de una ciberamiga que todos éramos ella. Hoy quiero decirte que yo soy tú, que #YoSoyNatalia. Y que quiero que te cures y que me mandes un vídeo y un montón de fotos viendo auroras boreales. Te quiero mucho Natalia.

33 comentarios en “Querida Natalia

  1. Querido Óscar: me uno a tu dedicatoria y además te quiero transmitir a ti y a todos los que saben de la duendecilla de las pelucas un mensaje de tranquilidad de su parte. Me ha pedido que os diga que está descansando un poco y cogiendo fuerzas para seguir luchando. Pero que está bien y nos va a seguir alegrando con sus historias y dando todo el cariño que rebosa.
    En breve estará de nuevo por nuestras casas.
    Y a Nata le envío todo mi amor y ella ya lo sabe.
    Eres grande Óscar, igual que ella.

    Le gusta a 6 personas

  2. Pero qué bonita carta, Óscar. ¿Qué más puede pedir una persona que una dedicatoria tan llena de amor y sentimiento como la que tú has escrito? De todo lo bueno que me ha dado y me da el blog encontrarme una persona como tú es de lo mejor. Todo mi ánimo y mis mejores deseos para Natalia. Y toda la fuerza que necesite. Besos enormes.

    Le gusta a 1 persona

  3. Si es que no os puedo dejar ni unos días!. Estoy más perdida que un pavo en nochebuena. Parece que Natalia no se encuentra bien y lo siento muchísimo. Es una mujer con mucha fuerza y alegría que siempre tiene palabras de cariño para todo el mundo. Desde aquí le mando mi apoyo y muchos abrazos. Oscar, una carta preciosa, gracias por compartirla con nosotros y tenernos informados.
    Besos.

    Le gusta a 3 personas

  4. Querido Oscar, una carta preciosa, que estoy segura que a Natalia le llegará al corazón. Es un regalo que personas como tú lleguen a tu vida con ese equipaje de cariño tan maravilloso.
    De nuevo, mi cariño para ella y para ti. Eres muy majo.

    Le gusta a 2 personas

    1. Muchas gracias María. Espero que le guste tanto como a vosotros. No le he dicho nada para que lo vea de sorpresa cuando se encuentre más animada. Pero me da en la nariz que tú vas igualmente con un equipaje como el mío y que tenerte en la vida de uno es también un regalo… Besitos

      Le gusta a 2 personas

  5. Hace poquito que entré en contacto con muchos de vosotros por aquí, Natalia de las últimas, pero estoy de acuerdo contigo, niño, en que es un amor de persona, hace que se me dibuje una sonrisa, alegre o no, siempre que la leo, por mi página o por cualquier otra. Es extraordinaria y encontrarla es todo un lujo. Miles de besos, artista,porque pones en palabras lo que muchos de nosotros sentimos. Y miles de besos para Natalia también,estaremos aquí cuando vuelvas, preciosa, para recibirte con todo el cariño que mereces.

    Le gusta a 2 personas

  6. Ay, Óscar….¿pero cómo puede ser?. ¿Y ahora qué digo yo?. Pues que te adoro, que eres un cielo….que tus palabras me envuelven de ternura y que estás lleno de bondad.

    Llevo más de cuatro meses de baja y no me quejo porque todo va y tiene que salir bien.(Además tengo pelucas para dar y tomar ) Esto ha sido un «resbalón», que me ha dejado en la cama tirada unos días. Bastante débil…..con lo que le digo yo a mi mente que no baje la guardia…Y esta vez el cuerpo se impuso por goleada. Pero batalla ganada. Ahora a seguir luchando.

    Gracias, Óscar, miles de gracias. Ha sido un tesoro encontrarte. A tus historias y al hombre tras ellas. No creas que queda tanta gente con emoción. Así que no te muevas de mi lado…¿me lo prometes?.

    Un beso enorme. Eres inmenso.

    Le gusta a 2 personas

    1. No tienes que decir nada corazón. Con que sonrías me basta. No sabes cuánto me alegro de leer que todo va bien y que has ganado la batalla. Y no tienes de qué preocuparte: te prometo que no me moveré de tu lado cariño.
      PD. Si quieres responder a alguien en sus comentarios, tienes total libertad para hacerlo. Esta entrada también es tuya.

      Le gusta a 2 personas

¡Cuéntame lo que quieras!